Grito de lluvia…
Llueve y es domingo.
Domingo de obstinado pasillo
-túnel que ciega –
domingo de besos que esperan
-rocío que no llega-
Busco la hora
en todos los relojes de mi casa
-llaman a misa los tejados-.
Grito que llueve y es domingo
por si alguien no lo sabe
-por si yo misma lo he olvidado-
a pesar del pasillo cegado
de los besos que no llegan
de los tejados que llaman a misa
-y de que no tengo iglesia-
que desplume mis pecados.
Carmen Sampedro
Linares, abril 2019