Si quieres…
La vida me vistió para el llanto con ropitas de amargo color y olvidó una canción de cuna para evocarla en días grises. La vida, sin embargo, no pasó de largo. Me regaló un pañuelo de sueños y palabras, que secan mi llanto y rezan a ningún dios. Vísteme tú, si quieres, y si te deja la vida. Vísteme de canela y esencia. Desnuda mi ausencia. Carmen Sampedro Vic